Las vacaciones no solo son un momento de descanso, sino una oportunidad real para mejorar nuestra salud física y mental. Según la Dra. Connie Capdevila, tomarse un tiempo para desconectar ayuda a liberar tensiones, evitando el síndrome de burnout. La planificación de las vacaciones genera una sensación de bienestar que puede durar semanas antes del descanso real, y la desconexión permite centrarse en el presente, reduciendo el estrés.
¿Por qué son tan beneficiosas?
La investigación muestra que las vacaciones no solo mejoran el estado de ánimo, sino que también aumentan la productividad tras el regreso. Estas ofrecen una distancia saludable de nuestras preocupaciones diarias, ayudándonos a relativizar los problemas y darnos la oportunidad de aprender nuevas habilidades, lo que refuerza nuestra sensación de bienestar.
Pautas para mantener los beneficios de las vacaciones
- Evitar volver justo antes de reincorporarse al trabajo: Reserva tiempo para un ajuste mental y físico.
- Recuperar energía: Si las vacaciones incluyeron actividades agotadoras, asegúrate de tener tiempo para descansar.
- Prolongar el bienestar a través de recuerdos: Fotografías, objetos o aromas del viaje pueden ayudar a extender la sensación de relajación.
- Usar la energía de las vacaciones para reflexionar: Aprovecha el impulso para pensar en cambios positivos en tu vida personal o profesional.
- Replicar actividades placenteras: Identifica lo que te hizo sentir bien durante las vacaciones e intégralo en tu rutina diaria.
Vacaciones saludables sin grandes gastos
No es necesario viajar lejos o gastar grandes sumas para disfrutar de unas vacaciones beneficiosas. Actividades sencillas como disfrutar de una buena comida, conectar con personas a las que no sueles dedicar tiempo o aprender algo nuevo pueden ser igualmente revitalizantes.
La Dra. Connie Capdevila ofrece apoyo terapéutico para ayudar a gestionar el estrés y conflictos personales. ¿Listo para ganar salud y bienestar? Empieza con una pausa consciente.